Ayer por la mañana se produjo una nueva actividad paroxística en el Etna. También en este caso afectó al Cráter Sureste, donde aparecieron altas fuentes de lava. El nuevo fenómeno fue precedido por un desbordamiento de lava, que se dirigió hacia el desértico Valle del Bove.
La nube eruptiva producida por la actividad explosiva se dispersó entonces en dirección este-sureste provocando la caída de cenizas.