El Etna no se detiene y desde esta noche ha comenzado a emitir fuentes de lava desde el cráter sureste. El Instituto Nacional de Geofísica y Vulcanología, Observatorio del Etna, explicó que desde las primeras horas del 15 de febrero ha observado una intensificación gradual de la actividad explosiva en el cráter sureste. Mientras que la actividad es continua en la boca oriental del mismo cráter, se observaron explosiones esporádicas y a veces violentas en la «boca de la silla». Continúa – siempre explica el Ingv – la actividad explosiva en los cráteres intracrater Bocca Nuova, Voragine y Nordeste. En cuanto a la amplitud media del temblor volcánico, ésta ya había mostrado las primeras horas de esta mañana una tendencia a aumentar. Desde hace unas 16 horas se ha registrado un aumento aún más significativo. La fuente del temblor se encuentra debajo del cráter SE, a una profundidad de unos 2.900 metros. La actividad infrasónica parece ser elevada, tanto por la frecuencia de aparición de los transitorios infrasónicos como por su amplitud.